[Jorge Jesús de la Cruz]

* Lucran con necesidades de niños

Hace unos días Candelario Pérez Alvarado de la mano de Juan Manuel Fócil dieron a conocer la realización de un partido de futbol con figuras legendarias de dos equipos de futbol mexicano, para juntar fondos que les permita adquirir un costoso equipo que se requiere en el Hospital del Niño. El objetivo es loable, de hecho se puede asegurar que se tendrá un lleno en el Estadio Olímpico por tratarse de apoyar una causa noble.

Sin embargo, lo que a todas luces es reprobable, viene siendo la estrategia implementada por ambos legisladores perredistas, de andar en labor de proselitismo en varios municipios, acción a la que se confabulan alcaldes, para dizque promocionar el partido de futbol, cuando lo que están haciendo es promocionarse ellos mismos, por lo cual, se está perdiendo el propósito central de este evento, que se supone es una labor altruista.

Candelario Pérez y Juan Manuel no están dando paso sin huarache. Al contrario, están lucrando con el dolor de niños, les funcionó muy bien con el programa de operación de labio y paladar hendido; en esta ocasión presuntamente andan vestidos de ovejas, cuando son auténticos lobos, promocionando un evento, del cual están sacando ventaja política.

El partido de futbol “Leyendas con Causa” tiene un propósito político, no sabemos si los jugadores que han aceptado asistir a jugar la próxima semana tengan información de lo que se viene fraguando, utilizarlos para una labor altruista, con el trasfondo de estarse promocionando ambos personajes.

Se requiere la adquisición de un equipo médico denominado «Arco en C», que tiene un costo de 80 mil dólares, servirá para hacer diagnósticos a niños en el Hospital Infantil; lo que no se vale es andar promocionándose con fines personales, debido a que Candelario y Fócil han expresado su interés por estar en las boletas electorales del 2018, pero darse a conocer a través de esta manera, es reprobable.

Los niños enfermos requieren ayuda, es bueno que se realicen pero en forma desinteresada, sin estar sacándole provecho político. Que pena ver a Candelario y Juan Manuel promoviendo eventos altruistas, para buscar ventaja a sus demás competidores, eso es no estar participando en una competencia de manera honesta.

Quizás han considerado que es una forma diferente de impactar en sectores sociales desvalidos, pero lucrar con el dolor ajeno, con las enfermedades de niños, no es honesto ni ético. Se exhiben Candelario y Juan Manuel como carroñeros de la política, por decir lo menos.

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