[Jorge Jesús de la Cruz]
* Le pesa al PRI falta de unidad
Si de algo adolece el PRI estatal en estos momentos, es la falta de unidad. Aunque la pregonen en sus discursos los dirigentes actuales, en los hechos se hacen pedazos, razón por la cual no pudieron organizarse en la elección extraordinaria, llevándolos al tercer lugar las decisiones erróneas que cometieron a diario, con un dirigente gris que hasta el momento no ha podido consensar con todos los grupos para ver si se queda o se larga del cargo.
Cuando en enero pasado asumió Miguel Ángel Valdivia la dirigencia del PRI estatal, se dijo que había unidad. Luego al perfilarse la candidatura de Liliana Madrigal, también presumieron que existía unidad para llevarla al triunfo; en ambos casos queda demostrado que es una falacia, de lo contrario tuvieran un mejor panorama hacia la siguiente elección.
Pese a que Valdivia anda en gira por los municipios para medir sus posibilidades de quedarse en el cargo, la información que difunden con los hechos que suceden, no contrastan. Por ejemplo, en Macuspana, llegó tarde y la clase política fue excluida, lo mismo en Balancán, al sentarse solamente con unos cuantos lideres que no representan a nadie.
Ahora quien pregona la unidad es Miguel Moheno, porque alguien le dijo que podía ser el nuevo dirigente estatal. El miércoles anduvo por Cunduacán, según nos comentan, estuvo la clase política reunida, pero eso es muy diferente a que realmente le hayan otorgado el respaldo a sus aspiraciones por la dirigencia. Ya estuvo en Comalcalco, y Paraíso, con los mismos de siempre, creándoles expectativas que difícilmente vayan a consolidarse, porque cuando surjan otros aspirantes y vayan a buscar respaldo, es donde se medirá quien tiene mejores apoyos.
Con Valdivia el PRI sigue en picada; ayer expresaba Cesar Rojas la necesidad de que todos los priistas se involucren en el futuro del partido, que digan si es con el interino que se quedan o debe entrar un liderazgo nuevo, diferente, fresco, que garantice mejores triunfos para el 2018, porque los cambios anunciados hace unos días, en nada abonan a formentar la unidad. En Comunicación Social se encuentra una desconocida, que ni siquiera ha tenido la inteligencia para presentarse ante los medios.
La falta de unidad, es la que pone al PRI desde ahora, en la antesala de una nueva derrota electoral en el 2018, con la posibilidad de que se mantengan en el tercer lugar de las preferencias. Con Valdivia no se logró estar unidos, Moheno en su caminar, le dicen que sí, falta que sea verdad. Sin unidad real, de nada sirve que se perfilen candidatos, al final, nadie se suma en apoyarlos.
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