[Redacción]
* Chespirito fue Americanista de corazón, ya que siempre estaba pendiente de sus Águilas, y aunque no era un hombre de cruzar apuestas, nunca dejaba de celebrar todos los triunfos del equipo
México, DF.- Los seguidores de Roberto Gómez Bolaños podrán tener la oportunidad de darle el último adiós a su ídolo, ya que este domingo 30 de noviembre a las 11:00 horas se realizara una misa de cuerpo presente en el Estadio Azteca.
Y es que de acuerdo a información del conductor y periodista Joaquín López Dóriga en su cuenta de Twitter, anunció que la cita sería este domingo 30 de noviembre en el Estadio Azteca, a las 11:00 horas, además la petición para el tributo es que lleven una flor y lo despidan como a los grandes, en un gesto de cariño y admiración.
Cabe recordar que el comediante siempre llevó los colores de la América tatuados en su corazón, ya que fiel seguidor del cuadro de Coapa, además que se mantuvo cerca de las hazañas de este conjunto, con el que tenía una estrecha relación.
De igual forma sus ídolos fueron Enrique Borja y Horacio Casarín, al grado que en sus películas El Chanfle I y II, buscó hacerle un homenaje al primero, además de que en diferentes capítulos de sus programas de televisión lo mencionaba con profundo orgullo.
Por ello, las películas se rodaron en el Nido de Coapa (casa de las Águilas), así como en el Centro de Capacitación y el Estadio Azteca; en ellas, Chespirito le daba vida a un utilero del América, que soñaba con ser tan famoso como todos los futbolistas que militaban en el plantel, incluido el presumido «Valentino», que fue encarnado por Carlos Villagrán (Quico).
Los jugadores que aparecían utilizaron el uniforme conmemorativo del cuadro azulcrema, con motivo de su 60 Aniversario.
En el filme, figura el entrenador Moncho Reyes, personaje que realizó Ramón Valdés inspirado en la figura del técnico Ignacio Trelles, un estratega al cual tenía en alta estima Gómez Bolaños.
Chespirito fue Americanista de corazón, ya que siempre estaba pendiente de sus Águilas, y aunque no era un hombre de cruzar apuestas, nunca dejaba de celebrar todos los triunfos del equipo.