[Antonio Rivera]

En presencia del gobernador Adán Augusto López Hernández, rinde el magistrado Enrique Priego Oropeza su Primer Informe de Actividades ante la LXIII Legislatura del Congreso del Estado

Agradece al Ejecutivo todo el respaldo brindado a su gestión, y reconoce la solidaridad de los diputados, que aprobaron las reformas respectivas a la Ley Orgánica del Poder Judicial, el código penal y otras disposiciones normativas

Villahermosa, Tabasco.- Con un reconocimiento a los poderes Ejecutivo y Legislativo, por el respaldo decidido que han brindado a las tareas del Poder Judicial, el presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura, Enrique Priego Oropeza, rindió este martes su Primer Informe de Actividades.

En presencia del gobernador Adán Augusto López Hernández, quien acudió como invitado al ejercicio de rendición de cuentas ante la LXIII Legislatura al Congreso del Estado, el titular de la TSJ extendió un reconocimiento especial al jefe del Ejecutivo “porque además de fortalecer las labores del Poder Judicial, ha brindado su total apoyo al personal que labora en la institución”.

De frente a la máxima soberanía popular, Priego Oropeza agradeció además la solidaridad del Legislativo no sólo en la asignación presupuestal, sino también por aprobar reformas a la Ley Orgánica del Poder Judicial, el código penal y otras disposiciones normativas.

Afirmó que en el TSJ se trabaja para que la justicia en Tabasco inspire confianza, y recordó a quienes conforman esta institución “que no solo es importante la cantidad; es aún más importante la calidad de nuestras resoluciones”.

En la sesión pública con carácter de solemne, Enrique Priego garantizó que las sentencias emitidas desde el Poder Judicial están apegadas al Estado de Derecho.

Las sentencias, remarcó ante legisladores locales de Morena, PRD, PRI y PVEM, nunca han sido resultado de “rencores, dolores corporales, ni mucho menos de las flaquezas del alma”.

El magistrado presidente señaló que los impartidores de justicia son seres humanos y por consiguiente no son perfectos, de allí que reafirmó como principio y divisa del trabajo en  esta institución “que un juez puede ser falible, pero no corrupto”.

Priego Oropeza dejó claro que hacer justicia no es asunto de individualidades, y adelantó que el año próximo, en el Poder Judicial se redoblarán esfuerzos, “porque ya quedó muy lejana la época en el que al juez sólo le bastaba su código adjetivo y su código sustantivo para dictar sentencia”.

Expuso que en la época actual, en la globalización de la aplicación del derecho, para los impartidores de justicia es necesario, que además de sus códigos, conozcan e interpreten correctamente la Constitución Federal, la Constitución Local y los tratados internacionales.

Tambié, abundó, se debe aplicar eficazmente la jurisprudencia mexicana y la de la Corte Interamericana de Derechos Humano, y se debe saber juzgar con perspectiva de género y reconocer siempre el interés superior del menor.

«El derecho es dinámico, nunca se detiene; por ello el juzgador no debe rezagarse; debe mantenerse actualizado, so pena de quedarse en el pasado», puntualizó Priego Oropeza.

Conforme a lo previsto, el presidente del Congreso del Estado, Rafael Elías Sánchez Cabrales, contestó el informe rendido por el presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura.