[Jorge Jesús de la Cruz]
* El Afecto Peje
Tabasco le volvió a cumplir a Andrés López Obrador con el voto mayoritario, pese a que hubo personas como Gina Trujillo que decían el paisanaje no nubla la inteligencia, equivocándose como lo ha hecho en otras ocasiones. La jornada electoral ha tenido de todo, pero en términos generales ha sido importante la participación ciudadana, y sobre todo para el caso de la elección presidencial, donde la mayoría de los tabasqueños no tuvieron duda y le dieron su voto nuevamente al paisano; lo hicieron en 2006 y 2012, lo ratificaron una vez más.
No hay duda, por primera vez en muchas elecciones las encuestas en México no se equivocaron, quizás en las diferencias porcentuales haya alguna diferencia, pero las tendencias siempre estuvieron a favor del paisano y por eso logró la hazaña, después que en dos ocasiones se le negó esa oportunidad. Hoy López Obrador no podrá tener excusas para llevar a cabo todas las propuestas de campaña que hizo, ese importante respaldo del pueblo reflejado en las urnas es la razón suficiente para dar resultados de inmediato, hacerlo con firmeza, porque es mucho lo que se espera de él también en el ejercicio del Gobierno.
Para Tabasco hay muchas propuestas, las reitero el pasado miércoles en el marco de su cierre de campaña, debe ir atendiéndolas de manera inmediata, porque para eso le dieron el respaldo mayoritario en las urnas; pidió votar parejo en las urnas, en algunos casos los tabasqueños lo hicieron por otras opciones, debido a que lamentablemente hubo candidatos en Morena que se confiaron en el Efecto Peje y no hicieron campaña; esto de servir de ejemplo para que en los siguientes procesos electorales se ponga de candidatos a personas con liderazgo real y no ficticio.
El afecto al Peje lo tiene ya con un pie en Palacio Nacional, el otro lo pondrá el 1ro de diciembre cuando rinda protesta, porque no ira a Los Pinos, ya anticipó que formará parte del Bosque de Chapultepec; Tabasco es mucho lo que espera del próximo presidente, en esta ocasión no debe quedar en promesas, como lo hicieron los anteriores, con López Obrador tiene que ser en serio y pronto, no hay que esperar mucho para hacer sentir su respaldo.
Si amor con amor se paga, López Obrador tiene que retribuir con creces el Afecto Peje que le dieron ayer en las urnas; fue capaz de abatir el alto abstencionismo que se genera en procesos electorales; el llamado a votar fue atendido sin titubeos; en esa medida, sin titubear, debe empezar a responderle a su pueblo, a su tierra, a su agua, para que el tabasqueño diga que valió la pena votar por el paisano. El Afecto Peje apenas empieza.
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