[Jorge Jesús de la Cruz]

* Absurdo rechazo a bodas gay

En los días recientes ha surgido la polémica en la entidad porque la diputada Ana Bertha Vidal Fócil presento una iniciativa para modificar el Código Civil y autorizar matrimonio en personas del mismo sexo, conocidas comúnmente cono bodas gay, dictamen que se dice será aprobado pronto para que en periodo extraordinario se someta al pleno y entre en vigor cuanto antes.

Al respecto hay voces en contra, empezando por la iglesia católica, y grupos sociales indicando que no por estar en el Siglo XXI y se realicen estas acciones en otros países del mundo, incluso ya se dan estas prácticas en varias ciudades del país, se tenga que hacer lo mismo, como si fuera una moda.

La iniciativa de Vidal Focil menciona que se deben reformar diversos artículos del Código Civil en relación al matrimonio entre personas del mismo sexo y que debe analizarse desde tres perspectivas: la discriminación, plataforma para discutir lazos familiares y el papel que el Derecho debe jugar, toda vez que dicho tema es de relevancia a nivel nacional.

Otro ingrediente más para proponer estas reformas, es que ante la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de establecer constitucionalmente permisible extender el matrimonio a estas parejas, se derivó también un derecho al libre desarrollo de la personalidad que protegía las relaciones y afectivas de las personas.

Por esta razón es necesario reformar el Código Civil del Estado a fin de hacerlo acorde al mandato del máximo tribunal, en referencia a que ningún mandato puede disminuir o restringir los derechos de una persona a partir de su orientación sexual, con lo que se concretará la reforma de los artículos 116 Fracción I y 154, así como ajustar el artículo 399 Fracciones I y II en relación a la adopción que impera este tipo de unión matrimonial.

Sin embargo, hay quienes se oponen a esta aprobación, por el hecho de que se tienen otras iniciativas relevantes presentadas con anterioridad y no hay interés en poder sacarlas, ya que al parecer existe la posibilidad de aprobar las bodas gay en un periodo extraordinario.

Al respecto no hay mucho que discutir, quienes se oponen son grupos que de manera automática lo van a hacer toda la vida, nunca estarán de acuerdo, y al final de cuentas, en estos tiempos nada debe asombrarnos sobre la convivencia en parejas del mismo sexo y si quieren darle una mayor solidez a sus relaciones casándose, que lo hagan, nada hay de malo en que se haga. Porque cada quien hace de su vida un papalote.

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