(Redacción)
Un estudio sugiere que el gigante gaseoso podría haber sido la “tumba” de una serie de diminutos planetas enanos que, atraídos por su enorme gravedad, fueron “devorados” por él
Ciudad de México 14 dw julio 2022.-Un estudio sugiere que el gigante gaseoso podría haber sido la “tumba” de una serie de diminutos planetas enanos que, atraídos por su enorme gravedad, fueron “devorados” por él.
Cada vez la ciencia revela los misterios del universo, para muestra, las más recientes imágenes captadas por el súper telescopio de la NASA, James Webb que esta semana nos ha revelado increíbles instantáneas del cosmos.
Y es que si del universo hablamos el tema es basto, un reciente estudio publicado por la revista especializada Astronomy and Astrophysics, reveló que, si bien el planeta Júpiter es, en su mayoría gas, también posee un núcleo rocoso y podría ser más grande de lo que se pensaba.
De acuerdo con la publicación y basado en análisis de la NASA, tras estudios químicos de los componentes que se encuentran en el interior de su densa atmósfera, ha podido acercarse a cómo fue su formación.
La hipótesis plantea que Júpiter puede haber crecido a partir de “devorar” a otros planetas enanos que se encontraba a su alrededor y que fueron atraídos por su enorme gravedad.
Esta suposición surge tras analizar los datos aportados por la sonda espacial Juno, lo que permitió a los científicos de la NASA trazar un mapa del material rocoso del núcleo del gigante gaseoso.
De esta forma se revelo la presencia de abundantes elementos pesados.
“Son datos muy singulares que solo podemos obtener con una nave espacial que orbita alrededor del planeta”, afirma Yamila Miguel, astrofísica de la Universidad de Leiden y autora del estudio.
Así, se supone que, el núcleo de Júpiter se podría haber formado por la acumulación de miles de millones de rocas espaciales más pequeñas, o bien, por la absorción de planetas enanos, también llamados “planetesimales”.
¿La Tierra corre peligro?
Si te estás preguntando sí el gigante gaseoso nos devorará algún día, los científicos creen que no, y explicaron que, de no haber absorbido esos planetas o rocas espaciales, Júpiter podría tener el mismo tamaño que la Tierra o Marte.
Además, creen que el material rocoso de Júpiter equivale a entre 11 y 30 veces la masa de la Tierra.
Finalmente concluyeron que hasta el momento, no es posible observar directamente cómo se formó Júpiter, por lo que es necesario juntar las piezas con la información que se ha descubierto hasta el momento. (Fuente: Excelsior)