(Redacción)
Las familias, señaló, están destinando una gran cantidad de recursos para recibir servicios de salud, indicó la consultora
Ciudad de México a 12 de febrero de 2022.-De los 102 millones de mexicanos que están afiliados a servicios de salud pública sólo el 20 por ciento los utiliza debido a fallas como desabasto de medicamentos, deficiencias en la atención, tardanza en la entrega de citas, entre otros, reportó el centro de análisis Polithink.
Durante el «Foro virtual de información, análisis y propuesta. Cobertura Universal de Salud y Enfermedades no Transmisibles», organizado por la asociación Salud Justa, Adriana Rocha, directora de Polithink, remarcó que la cobertura efectiva del sistema de salud es baja.
Señaló que aunque el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) no es necesariamente una mala alternativa, en el sistema de salud actual persisten pendientes en la eficiencia, equidad y recursos.
Enfrenta además, retos en la sostenibilidad y financiamiento de la atención, en infraestructura y en necesidad de personal con miras a la cobertura universal.
Debido a los problemas heredados y que persisten, estimó, la gente prefiere acudir a servicios privados o de paga.
«El Insabi no necesariamente es una mala alternativa, pero es una alternativa que requiere todavía de mucha inversión para poder ser operativa», consideró.
Refirió que la recomendación internacional sugiere que el gasto total de cobertura en salud debe equilibrarse, de manera ideal, en 80 por ciento del gasto público y 20 por ciento de gasto privado, sin embargo, en México, señaló, esta proporción es de 50.8 del gasto es público y 49.2 por ciento es privado.
Además, del gasto privado, la gran mayoría, es decir, el 84 por ciento es gasto de bolsillo, lo absorben las familias con recursos propios.
Las familias, señaló, están destinando una gran cantidad de recursos para recibir servicios de salud, indicó la consultora.
Rocha recordó que el financiamiento del sistema de salud cambió en la actual Administración federal.
En el sexenio pasado, recordó, se contaba con el Seguro Popular, que contemplaba cuotas de recuperación en servicios médicos de primer, segundo y tercer nivel y ahora opera el Insabi, que considera servicios médicos sólo de primer y segundo nivel a través del IMSS Bienestar, de hospitales generales, rurales y comunitarios.
Advirtió que actualmente los servicios de tercer nivel de muy alta especialidad no están considerados como gratuitos.
Si bien con el Insabi se elimina el requisito de afiliación, lo que es un avance en el tema de acceso universal, señaló que los costos que implican los servicios de tercer nivel de atención alejan a la salud de la gratuidad en salud.
De acuerdo con Rocha, para hacer efectivo el acceso universal de salud aún se requiere un incremento en el presupuesto de salud, una reconstrucción financiera, la ampliación de infraestructura médica y la contratación de personal, entre otras mejoras.(Fuente:Agencia Reforma)