(Redacción)
La nueva gobernanza hoy se hace de la mano de los ciudadanos. México le pertenece a todos, por eso cada uno debe contribuir de la mejor manera para que las cosas sucedan
Xalapa, Veracruz a 05 de junio de 2021,- La Arquidiócesis de Xalapa a través de su comunicado dominical condeno los sobornos y amenazas para obtener sufragios y aseguró que el voto no se compra ni se vende.
A continuación, el comunicado:
Este 6 de junio de 2021 seremos protagonistas de las elecciones más importantes de la historia de nuestro país. Somos responsables de elegir a nuestras autoridades y a nuestros legisladores y con ello el rumbo de nuestro país. Hemos tenido tiempo para CONOCER las diferentes propuestas políticas y DISCERNIR el sentido de nuestro voto. Este día 6 de junio nos toca VOTAR.
Después de las elecciones y una vez que el árbitro electoral nos dé a conocer los resultados, empezará otra etapa muy importante que será la de la OBSERVAR Y EXIGIR a nuestras autoridades que lleven a cabo lo que anunciaron en campaña. El despertar ciudadano y el interés en la democracia que se ha logrado en este proceso electoral no termina con las votaciones, continuará ahora con otras formas de participación. La nueva gobernanza hoy se hace de la mano de los ciudadanos. México le pertenece a todos, por eso cada uno debe contribuir de la mejor manera para que las cosas sucedan.
Con nuestro voto expresamos nuestro amor a la Patria y nuestro compromiso para colaborar en una mejor sociedad. Muchos mexicanos, antes que nosotros, fueron aportando mucho de lo que hoy somos; nuestra democracia cuenta con instituciones serias que se han ido construyendo poco a poco a lo largo de muchos años; no obstante que tienen sus límites, son instituciones que han dado certidumbre y han permitido transitar de forma pacífica. Con nuestro voto manifestamos además nuestras convicciones, valores y las expectativas del país que deseamos y queremos construir.
Es de suma importancia ir a votar con madurez cívica, en forma responsable, en un clima de respeto, paz y conciencia ciudadana. Las elecciones se ganan con votos y por eso este 6 de junio todos debemos ir a votar.
Existe una gran deuda social entre los ciudadanos y entre sus anhelos más urgentes está la seguridad, la salud, la economía y la educación. Hace falta poner un alto a los secuestros, las extorsiones, los homicidios y las desapariciones forzadas y las arbitrariedades. En el caso de la educación urge la formación en valores y que los jóvenes tengan espacios y medios para estudiar, trabajar y convivir sanamente con los demás.
Se requiere de un mayor compromiso con los trabajadores, los campesinos y los indígenas; se necesita ofrecer oportunidades y condiciones para que la vida de todos cuenta con mejores niveles en vivienda, trabajo, alimento, seguridad, justicia y ambientes sanos de paz y armonía.
Nuestra sociedad requiere de legisladores comprometidos para proteger la vida de todo ser humano, desde su concepción hasta su muerte natural; es necesario proteger al que está por nacer, como al adulto mayor, a los niños y adolescentes maltratados, explotados o abusados; se necesitan leyes que garanticen los genuinos derechos de las mujeres, de los estudiantes, de los campesinos y de los migrantes. Se necesita reconocer que somos un país plural, con una gran diversidad de valores y que debemos trabajar por la unidad y la concordia en medio de la diversidad.
En estos comicios todos estamos involucrados: los ciudadanos, los candidatos, los partidos políticos, los órganos electorales y los medios de comunicación. Cada uno debe aportar lo mejor de sí y su responsabilidad de saber respetar los resultados y colaborar con quienes resulten electos.
Nos auguramos que la participación en esta jornada electoral sea abundante y que todos ejerzamos este derecho y obligación de votar. El voto es personal, libre, razonado y secreto. Votar es un derecho, una obligación y un deber moral de todo ciudadano.
El voto no se compra ni se vende: es absolutamente condenable que se consiga a través de sobornos o amenazas. Todo lo que constituya una forma fraudulenta de obtener el voto, es un delito deshonesto y constituye una falta moral grave, pues se manipula a la persona, hiriendo su dignidad, tanto más cuando se especula con la pobreza o la ignorancia de la gente sencilla.
Si todos buscamos el bien común y cumplimos con nuestro deber de ir a votar, todo México ganará. Esperamos que esta jornada electoral se viva en un ambiente transparente y ordenado, acompañado de una fuerte participación. (Pbro. José Manuel Suazo Reye