Cierre de empresas en Tabasco, es ante la corrupción Sindical de Ricardo Hernández Daza y no por el COVID19: Obreros

(Antonio Rivera)

Los propios trabajadores informaron que el dirigente sindical exige hasta mil 500 pesos para contratar a quienes aspiran a trabajar ahí

Villahermosa. Tabasco a 16 de mayo de 2020.- Las Empresas como Diavaz, Schlumberger, Weatherford, Baker y Petrofac, han cerrado ante la gran corrupción que ha operado por la mafia sindical de Ricardo Hernandez Daza.

Ricardo Hernández Daza quien a base de amenazas,chantaje y extorsión contra las empresas obtuvo contratos para venderles a los agremiados a la CTM, son también parte de loa motivos para que estas empresas abandonen la entidad.

Los trabajadores que construyen la refinería de Dos Bocas acusaron a Ricardo Hernández Daza, líder del Sindicato Estatal de la Construcción en Tabasco, vinculado a la CTM, ( por cierto desconocido por esta confederación) de encabezar una red de extorsión.

Los propios trabajadores dieron a conocer que el dirigente sindical exige hasta mil 500 pesos para contratar a quienes aspiran a trabajar ahí.

Hernández Daza, cuenta con diversas demandas de los propios trabajadores sindicales quienes han sido golpeados por los guaruras.

Empresarios de Tabasco, señalan que uno de los presuntos extorsionador es Ricardo Hernández Daza, quien fue detenido acusado de defraudar a trabajadores a quienes ofrecía trabajos relacionados con la refinería, además de las empresas que llegaron a Paraíso.

Aunado a ello tiene denuncias por los delitos de extorsión, amenazas, daños en propiedad ajena, oposición a obras y obstrucción de servicios públicos.

Raymundo (incrustado en la administración municipal de TOÑO CALDO) y Ricardo Hernández Daza, laboran en el Gobierno municipal de Paraíso y opera el primero a favor de su hermano para evitar que cuando realicen los bloqueos a empresas no sean molestados ya que Raymundo Hernández Daza es subdirector de tránsito municipal, nombrados por el alcalde.

También se suman los problemas que ve­nían arrastrando desde el 2015, cuando se inició la crisis, producto de la reforma energética, las com­pañías petroleras están sufriendo ahora el duro golpe de la pandemia por Covid-19.

Empresarios y comerciantes locales confirmaron que son al menos seis compañías petroleras que están haciendo ajustes, como cie­rre de oficinas, traslado a otras sedes y lo peor, el despido de en­tre el 25 y el 30 por ciento de su plantilla laboral.

Esto significa que estarían des­pidiendo en conjunto entre 3 mil 750 a 4 mil 500 trabajadores.

Son las compañías Schlumberger, Petrofac, Wea­therford, Baker, Halliburton, Dia­vaz y en menor escala Marinsa, que en conjunto generan 15 mil empleos en Tabasco, tanto en ac­tividades de oficinas, de campo y el mar, informo Ramsés Pech, ana­lista del sector energético.

La empresa Halliburton, anunció que tomó la decisión de cerrar algunas oficinas en México y Tabasco durante mayo y junio.

Además de trasladar sus actividades a Reforma, en Chiapas, abandonado las oficinas que tenia en Villahermosa.

“Para ajustar nuestra infraes­tructura a la nueva realidad del entorno económico global, una de las acciones que hemos decidido implementar de manera inmediata es el cierre definitivo de las oficinas en la Ciudad de México, Villahermo­sa y Base Paraíso”, se lee en un co­rreo de la compañía que circuló.

Informa que el cierre de las ins­talaciones se llevará a cabo en mayo y junio para consolidar a los em­pleados en Reforma, Cunduacán, Dos Bocas y Ciudad del Carmen.

La empresa explica en el correo que la llegada de Covid-19 a México y los actuales niveles en los precios del petróleo afectaron las operacio­nes de los clientes.

Por último, líderes sindicales y trabajadores confirmaron la forma de actuar de estas compañías que hoy se lamentan, ya que contactaban a los DAZA y otros sindicatos y se hacían convenios bajo la mesa en lo oscurito y se pactaban hasta cuotas a la mano en 200 mil pesos mensuales, llegando a más del millón de pesos al mes en puro cobro de derecho de piso o extorsiones disfrazadas de cuotas sindicales para dejar trabajar a estas compañías.

Detallaron que con el consentimiento de las mismas y el visto bueno de PEMEX, dando esta última una hoja de prestación de servicios según para tal o cual obra (es decir obra FANTASMA ) facturando estas empresas a la paraestatal y de ahí el daño a la nación y al erario público, por lo que la salida de estas empresas no es más que porque él GOBIERNO FEDERAL descubrió estas anomalías ya que todas estas estaban laborando a Pemex como prestadoras de servicios coludidas con los sindicatos de los DAZA y hasta con la delincuencia organizada y las mismas están siendo investigadas por la fusión pública y la unidad de inteligencia financiera.

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