[Redacción]
Jacobo de Juan Millón, estudiante de la escuela «Comunidad Alianza», es uno de los dos seleccionados para ir a Burgas, Bulgaria el próximo 6 de julio, por haber obtenido los mejores resultados en esta competencia a nivel nacional
Mérida, Yucatán.- Las y los 11 estudiantes que conforman la delegación yucateca que participa en la Olimpiada Mexicana de Matemáticas para el nivel primaria y secundaria fueron premiados este día.
Y es que Jacobo de Juan Millón, estudiante de la escuela «Comunidad Alianza», es uno de los dos seleccionados para ir a Burgas, Bulgaria el próximo 6 de julio, por haber obtenido los mejores resultados en esta competencia a nivel nacional.
Él se ha dedicado a entrenar y a sus 13 años y sabe que tiene una excelente oportunidad para demostrase a sí mismo, ya que no hay retos imposibles.
Sus padres han sido los principales impulsores para que él siga sus objetivos, pues todos los días lo motivan para que estudie de una forma divertida y dinámica.
Jacobo invita a las y los niños para que se acerquen a esta materia, ya que ayuda al razonamiento lógico.
«No lo vean como cuentas, no es sólo eso, incluso se puede aprender de forma divertida. Tampoco hay que tener un bloqueo para aprenderlas», indicó.
En la Competencia Internacional en la que participará se reúnen sólo los mateatletas finalistas por país.
Al respecto, Delio Peniche Novelo, secretario de Educación, señaló que las matemáticas son una herramienta básica en el estudio de cualquier tema, pues son útiles para mejorar la calidad de vida y lograr un desarrollo profesional completo.
Es importante que en educación básica las y los estudiantes adquieran las habilidades para la escritura, la lectura y la aritmética, es por eso que un programa de aprendizaje de las matemáticas debe estimular la creatividad y desarrollar el pensamiento crítico y analítico.
Uno de los principales objetivos del Programa de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas (OMM) es promover el estudio de esta asignatura en forma creativa, para desarrollar el razonamiento y la imaginación de las y los jóvenes participantes, alejándose del enfoque tradicional que promueve la memorización y mecanización de fórmulas y algoritmos.