[Redacción]
Los hashtags siempre son detectables, es importante no publicar junto a ellos fotos de los hijos y menos con su nombre, pues pueden verse no sólo en México, sino en cualquier país donde haya gente interesada en trata o extorsión
Ciudad de México.- El hashtag se ha convertido en una herramienta indispensable para la creación de contenidos y la difusión de información importante sobre temas diversos, noticias, eventos culturales, artísticos y políticos. Esta tendencia nació en Twitter y poco a poco se ha extendido a Facebook, Instagram y Google.
Y es que un hashtag es una palabra, frase o grupo de caracteres alfanuméricos (sin espacios) que se emplea en las redes sociales para agrupar varios mensajes sobre un mismo tema; se identifica fácilmente, ya que está compuesto por el símbolo # (hash; algunos lo conocemos como gato) y un nombre o etiqueta (tag), según Fundéu BBVABancomer.
Acorde con los expertos, un hashtag permite que los usuarios de las redes sociales puedan participar en conversaciones sobre un tema particular y quedar agrupados bajo una misma etiqueta.
Mientras más usuarios participan, más promoción tiene la idea, producto, marca, evento o noticia que se ha subido a la red con un fin específico. El hashtag sirve, pues, para ganar presencia y que las personas encuentren con mayor facilidad el objetivo; es una forma de filtrar mensajes y clasificar datos.
La efectividad de los hashtag es probada. Según la revista Merca2.0, un estudio realizado por Twitter revela que los tuits que llevan estas etiquetas generan un 23 por ciento más de “clicks” que aquéllos que no las tienen y pueden duplicar la cantidad de retuits.
Sin embargo, las etiquetas deben emplearse de manera inteligente para que su uso sea eficiente y tenga resultados óptimos.
Al mismo tiempo, estas herramientas deben utilizarse con sumo cuidado, ya que su efectividad y eficacia les permite llegar a todo tipo de público, lo que los vuelve peligrosos, sobre todo cuando se mezclan con fotos, datos e información personal.
Por ello, no son casuales las alertas que el gobierno federal lleva a cabo sobre el cuidado que los ciudadanos, principalmente los niños, deben tener no sólo en el uso de hashtags, sino en el empleo de Internet en general.
Y es que en el mundo virtual de redes sociales las normas de privacidad y convivencia cambian con frecuencia, lo que pone en riesgo a niñas, niños, adolescentes y hasta adultos que las frecuentan.
En este sentido, el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), dependiente de la Secretaría de Gobernación, subrayó que todo lo que aparece en un #hashtag es público; se usa para categorizar información y recopilarla a su alrededor; lo consultan desde empresas y personas comunes hasta gente maliciosa.
Ante esta situación, señaló que como los hashtags siempre son detectables, es importante no publicar junto a ellos fotos de los hijos y menos con su nombre, pues pueden verse no sólo en México, sino en cualquier país donde haya gente interesada en trata o extorsión.
Asimismo, resaltó que el nombre de los hijos nunca debe ser un hashtag, ya que lo que puede resultar lindo para los padres, permite que los ladrones, de identidad o personas, tengan su fecha de nacimiento, nombre y rostro, creen cuentas falsas con esos datos y las usen en delitos, pero también para rastrear a las personas y sus familias.
El organismo consideró vital la revisión de las etiquetas que utilizan los niños y adolescentes, así como mantener con ellos una comunicación directa y sincera sobre sus gustos e intereses, para poder prevenirlos de los riesgos que se pueden encontrar en la red. Y es que hablar a tiempo con ellos puede ser la diferencia.
En efecto, los riesgos que enfrentan los usuarios de las redes sociales son grandes, como identidades falsas, acosadores, depredadores digitales; además, todos los datos que se publican en la red quedan en algún servidor o forman parte de una base de datos de la que se desconoce la ubicación.
Por eso las voces de alerta lanzadas desde diferentes dependencias del gobierno federal que plantean la existencia de un problema que ha cobrado algunas víctimas, pero que tiene todas las posibilidades de ser eliminado mediante la prevención y el uso cuidadoso y prudente de las redes.
En la Policía Federal, por ejemplo, existe una campaña intensiva de concientización, con la que exhorta a la ciudadanía, principalmente a los padres de familia, a mantenerse alertas de los sitios web y grupos en redes sociales que visitan los niños, a fin de identificar contenidos que influyan en su conducta y pudieran poner en riesgo su integridad física y psicológica.
Así las cosas, es importante no olvidar las principales recomendaciones para no ser víctimas de la delincuencia, como no brindar ni publicar información personal, como dirección, fecha de nacimiento, nombre de escuela; inculcar valores y principios como base de la educación que se recibe en casa.
También, fomentar la confianza y la comunicación asertiva; supervisar actividades en línea, así como personas y grupos con los que los hijos interactúan en Internet; no confiar en todo lo que se ve en la red y confirmar su veracidad.
Todas las niñas, niños, adolescentes (también se pueden incluir los adultos) tienen derecho a su identidad, a una vida libre de violencia, a su intimidad, a su integridad personal. Y la primera medida de precaución es manejar con cuidado los #hashtags.