[Redacción]
El senador de la república, afirmo lo que se debe regular son las sustancias contenidas en el cáñamo o las derivadas de cualquier proceso químico que generen un efecto en la salud y no a esta planta como tal
Ciudad de México.- El dictamen sobre la iniciativa que reforma diversos artículos de la Ley General de Salud y del Código Penal Federal debe modificarse con el propósito de construir un verdadero modelo regulatorio para el uso medicinal de la marihuana, afirmó el senador Roberto Gil Zuarth.
Y es que en entrevista con reporteros posterior a la conferencia de prensa conjunta con senadores de otros partidos y representantes de organizaciones de la sociedad civil, con relación al dictamen que será presentado mañana ante el pleno del Senado, el legislador dijo que lo que se debe regular son las sustancias contenidas en el cáñamo o las derivadas de cualquier proceso químico que generen un efecto en la salud y no a esta planta como tal.
“Lo que debe regular la ley de salud es una sustancia que genere, por su consumo, un efecto psicoactivo, que altere los sentidos y que cause efectos en la salud; eso no lo provoca la cuerda de cáñamo y, consecuentemente, por eso decimos que está mal planteado el dictamen”, insistió.
En la entrevista, el senador Gil Zuarth se refirió también a la aprobación de la nueva Ley de Vivienda por la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México (CDMX), la cual, dijo, fue una corrección del Jefe de Gobierno a su intención de gravar la plusvalía de las propiedades inmobiliarias de los capitalinos.
“Se dio un paso para atrás. Fue una forma de salir al paso de un equívoco, un error, una gravísima equivocación al plantear ese artículo que le expropia a la gente el crecimiento del valor de su propiedad”, afirmó.
Asimismo, al responder preguntas sobre el fallo del Instituto Nacional Electoral (INE) contra el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, respecto a sus apariciones en medios de comunicación, pidió a las autoridades electorales definir cuáles son las reglas para la promoción o no de los aspirantes a la Presidencia de la República.
“Para algunos sí se permite la difusión profusa y difusa de su imagen de cara al 2018; uno de ellos está abiertamente en campaña, dice que quiere ser Presidente, presenta proyectos de gobierno, tiene spots, es el jefe de su partido, dice que va a ganar la elección de 2018 y, simplemente, se le aplica un rasero de libertad absoluta. Mientras que, por otro lado, hay algunos aspirantes que por el solo hecho de decir en una entrevista que quieren ser candidatos a la Presidencia se les saca de cualquier posibilidad de estar en el espacio público”, dijo.
Aquí la versión de la entrevista al senador Roberto Gil Zuarth, posterior a la conferencia de prensa conjunta con la senadora Martha Tagle Martínez y representantes de organizaciones de la sociedad civil
PREGUNTA: ¿… esta propuesta que usted tiene entre sus compañeros panistas?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH (RGZ): Yo advierto que hay apertura del Grupo Parlamentario del PAN de discutir el tema y muchos están a favor de avanzar en una política mucho más reflexiva, más responsable, más humana y, sobre todo, a partir del cambio en California.
Algunos legisladores de la frontera de nuestro país, de la frontera de México, a partir del cambio que ha dado Estados Unidos, son más sensibles a las enormes implicaciones que puede tener eso para nuestro país.
Yo creo que hay apertura y disposición; por supuesto que hay más grados de consenso en el tema de los usos medicinales y terapéuticos, todavía hay algunas resistencias con el tema de los pasos hacia el uso personal, pero lo más importante es que hay apertura.
Y yo advierto que hay posibilidad de construir un consenso y, sobre todo, de convencer a los senadores de todas las fracciones parlamentarias de que si queremos hacer las cosas bien las podemos hacer bien y que el camino que se está ensayando hasta este momento no es la ruta correcta.
P: Lo que ya han expuesto algunos de sus compañeros de bancada, ¿cuáles son esos puntos en los que no están de acuerdo?
RGZ: Hay preocupaciones sobre los efectos de la despenalización y sus implicaciones en cuanto a las adicciones, que es digamos el argumento más común. Hay una preocupación legítima de que si se despenaliza pudiera alentarse el consumo.
Lo que hemos dicho es que hay evidencia científica, evidencia suficiente de otros modelos regulatorios que nos permiten concluir que cuando hay una buena regulación no se genera ese efecto; que si lo hacemos bien podemos contener la posibilidad de que aumente el consumo, como ha sucedido en prácticamente otros países y otros estados en la Unión Americana. Hay soluciones, pues.
La mayor preocupación está en si vamos a alentar el consumo a partir de un cambio regulatorio.
Yo diría que ahí está la nuez de la discusión y, sobre todo, de las preocupaciones prevalecientes en nuestro grupo parlamentario. Yo creo que es un tema de seguir discutiendo el asunto. Yo veo un amplísimo consenso sobre la necesidad de avanzar en los usos medicinales y terapéuticos, ahí creo que no hay enormes resistencias.
Lo que sí hay es un problema de comprensión: ¿Cuál es la materia que debe regular la Ley General de Salud?
Lo que plantea el dictamen es que regulemos una planta o, mejor dicho, el tallo de una planta, que es el cáñamo, lo cual es una insensatez.
Lo que debe regular la Ley General de Salud es una sustancia que genere, por su consumo, un efecto psicoactivo, que altere los sentidos y que cause daño a la salud; eso no lo provoca la cuerda de cáñamo y, consecuentemente, por eso decimos que está mal planteado el dictamen.
Hay que convencer a los senadores de que técnicamente esto tiene una serie de sofisticaciones, no simplemente hay que poner o quitar la palabra marihuana y sustituirla por cannabis o por cáñamo, sino construir un modelo regulatorio que se haga cargo de aquella parte, de todo lo que está contenido químicamente en la planta, que genera el efecto en la salud. De eso se trata esta discusión, si lo hacemos del punto de vista objetivo, científico, técnico y de seriedad.
P: Oiga, senador, uno de los casos emblemáticos sobre esta discusión es el caso de la niña Grace. Recuerdo que en la anterior aprobación lo que se pretendía aprobar, el padre de esta pequeña vino aquí a decir que lo que se iba a aprobar era un retroceso y que no servía para nada, en ese sentido, este nuevo dictamen que se pretende aprobar…
RGZ: Mantiene la misma lógica y lo explico brevemente. El padre de Grace compra el medicamento, el suplemento porque ni siquiera es medicamento, se compra en prácticamente cualquier tienda en los Estados Unidos, lo pide por internet; tiene una bajísima concentración de THC, bajísima, pero tiene concentración de THC. Una concentración que no hace daño en la salud, por eso no es un medicamento regulado en los Estados Unidos, por eso lo puede comprar libremente. A partir de un amparo lo importa a nuestro país.
Si trajéramos ese medicamento con la regulación que se pretende aprobar, tendría ella que ir… primero, el medicamento tendría que irse a un control sanitario específico, tendría que tener un registro específico de Cofepris pero, además, para poderlo adquirir, necesitaría una receta médica. Significa más costo de un medicamento que le sale más barato en los Estados Unidos.
De eso se trata, que con esta regulación el medicamento que necesita Grace no se podría utilizar en nuestro país, porque lo seguiría manteniendo en un régimen especial de obstáculos a su acceso.
P: Senador, ayer se dijo que esto era un acuerdo para la próxima semana, ¿acuerdo entre quién?
RGZ: Pues en las comisiones, pero yo creo que las comisiones no han hecho una reflexión lo suficientemente profunda de este tema.
Insisto, mientras la base de la propuesta legislativa sea el tallo de una planta, estamos equivocados; del tallo de una planta se hacen, en efecto, sustancias, medicinas, muchas otras cosas.
Ni siquiera de tallo, de las sustancias que están dentro del tallo, pero también se hacen camisetas, suplementos alimenticios, geles, cremas, gelatinas y eso no genera efectos en la salud.
Cuando nos equivocamos en la materia regulatoria se generan otros efectos; simplemente no tiene ningún sentido regular el cáñamo como tal, sino las sustancias contenidas en cualquier planta o derivadas de cualquier proceso químico que generan un efecto en la salud. De eso se trata la regulación, no de estigmatizar plantas, raíces o tallos.
P: Por otro punto, sobre la Asamblea Constituyente de la Constitución. Ayer el PRD dio un albazo con respecto a lo del pago de impuestos en propiedad. A ese punto cómo ve usted, es un mandato, una orden que da Miguel Mancera, el actual Jefe de Gobierno.
RGZ: Más bien fue una corrección a un desatino, fue un paso para atrás, fue una forma de salir al paso de un equívoco, de un error, de una gravísima equivocación al plantear ese artículo que le expropia a la gente el crecimiento del valor de su propiedad.
Creo que más bien fue una salida emergente para salir del paso de una circunstancia verdaderamente crítica que no pudieron explicar, que no saben explicar.
Y lo que llama mucho la atención es cómo el jefe de Gobierno, que ya había presentado su proyecto legislativo, que ya estaba en la discusión de la Asamblea Constituyente, le da instrucciones a algunos diputados de que ya no sostengan una parte de su proyecto.
Que quede para la imagen; simplemente fue un evento que no tiene mucho sentido.
Lo importante es la intención que originalmente tenían en el proyecto y es una intención de confiscar la propiedad de las personas, la propiedad de las familias de la Ciudad de México, de quitarle valor.
Es un contenido claramente confiscatorio, es propio de regímenes que no respetan la propiedad privada, que no respetan la libre empresa, que no respetan la esfera individual de las personas y creo que, más allá de un albazo, lo que yo puedo interpretar del acto del día de ayer es una corrección a un profundo desatino.
P: ¿Pueden estar tranquilos los habitantes de la Ciudad de México con lo que van a resolver?
RGZ: No, no, no, hasta que logremos el resultado final y hasta que desaparezca definitivamente de los textos. Mientras la Constitución de la Ciudad de México no esté terminada, concluida, aprobada, corremos el riesgo de que estos impulsos comunistas lleguen a buen puerto. Yo creo que eso es lo que tenemos que cuidar.
De parte de Acción Nacional, vamos a defender la propiedad y los intereses de las familias de la Ciudad de México y no vamos a avalar ni permitir que un gobierno se quede con lo que es propiedad y patrimonio de las personas.
P: Senador, yo le quería preguntar sobre toda esta polémica con el INE, el gobernador de Puebla. Él sostiene que lo están censurando, que hay una aplicación sesgada de la ley porque no se le permite realizar cierto tipo de promoción. ¿Usted cómo ve este caso?
RGZ: Creo que ya es momento de que el INE y el Tribunal Electoral definan con claridad cuáles son los cauces para la promoción o no promoción de los aspirantes a la Presidencia, porque hay distintos raseros y eso es una absoluta evidencia.
Para algunos sí se permite la difusión profusa y difusa de su imagen de cara al 2018; uno de ellos está abiertamente en campaña, dice que quiere ser Presidente, presenta proyectos de gobierno, tiene spots, es el jefe de su partido, dice que va a ganar la elección de 2018 y, simplemente, se le aplica un rasero de libertad absoluta.
Y por el otro lado hay algunos aspirantes que por el solo hecho de decir en una entrevista que quieren ser candidatos a la Presidencia se les saca de cualquier posibilidad de estar en el espacio público.
No tiene comparación la libertad que se le da a unos y la censura que se le da a otros.
Creo que ya es momento de que el INE y el Tribunal Electoral digan con claridad qué se vale y qué no se vale frente al 2018, precisamente para que se aseguren las condiciones de equidad y precisamente para que no se vicie de antemano el proceso electoral.
Misma regla para todos; piso parejo para todos. Si se puede, que se pueda para todos y si no se puede, que no se pueda para todos.
P: Senador, ¿la legislación es suficientemente específica o tiene lagunas que dan oportunidades de interpretación?
RGZ: Pues ya vimos. Si la legislación fuese lo suficientemente específica no tendríamos estas discusiones, pero también es cierto que por más precisa que pueda ser una norma, siempre se encuentran las zonas grises para burlarse, para evadirse de su aplicación y para eso están las instituciones, para mantener el espíritu, el sentido, el horizonte, el objetivo de esas disposiciones normativas.
Es el momento de que el INE y el Tribunal Electoral definan claramente la cancha de juego; que se diga qué se vale, qué no se vale; que saquen las tarjetas amarillas si es necesario, pero sobre todo que nos digan cuánto dura el partido, dónde se meten los goles, dónde hay fuera de lugar y cuándo el partido, simplemente, ya no está en condiciones de seguir adelante.
P: ¿Cuál es el riesgo de que los órganos electorales no establezcan reglas claras para esto?
RGZ: Que el proceso se vicie por falta de equidad, por falta de certidumbre, que en el momento en el que empiece la competencia como tal ya haya una ventaja de unos en detrimento de otros y que, en consecuencia, se genere un ambiente de no aceptabilidad de los resultados.
Cuando se violan las reglas de certidumbre, las reglas de equidad, las reglas de transparencia, las reglas de piso parejo en un proceso electoral, se generan poderosos incentivos a los contendientes de no aceptar el resultado.
Lo que tiene que hacer la autoridad electoral es poner orden precisamente para que no haya pretexto de aceptar el resultado sea cual sea.
P: Gracias.