(Redacción)

Definitivamente estas preguntas muchas veces no son formuladas con mala intención, pero no dejan de ser incómodas y como sabemos que son tus adoradas tías y no quieres discutir con ellas

Ciudad de México a 20 de diciembre de 2021.-La navidad es la oportunidad perfecta para convivir en familia, reunirse y disfrutar de un rato lindo después de no ver a tus familiares por varios meses. Sin embargo, nunca falta la tía o pariente que empieza con las preguntas incómodas cómo ¿Y el novio? ¿Y la boda para cuándo? ¿Y el trabajo?

Definitivamente estas preguntas muchas veces no son formuladas con mala intención, pero no dejan de ser incómodas y como sabemos que son tus adoradas tías y no quieres discutir con ellas, te dejamos aquí algunos consejos para responder a estos cuestionamientos y seguir disfrutando de un agradable tiempo en familia.

¿Y el novio/a?

Esta es una de las primeras preguntas que te hacen los parientes desde que llegas a la reunión. Si tienes pareja, sólo debes responder que esa persona está con su familia, pero que sin lugar a dudas lo conocerán en otra oportunidad.

Si por el contrario estás soltero, puedes responderles que por el momento no tienes novio o novia, si es el caso también puedes recordarle que eso ya lo habías explicado en otra ocasión y que en cuando encuentres a esa persona ideal se los harás saber. Bromea un poco con el asunto, como por ejemplo que esperas que Santa Claus te deje a tu media naranja en el árbol de navidad.

¿Y la boda para cuándo?

Después de interrogar a los solteros, van por las parejas y sin lugar a dudas van a preguntar cuándo piensan casarse. La forma más fácil de zafarse de la situación es decir que lo han platicado, pero que aún no ponen fecha o si están insistentes ponles una fecha muy lejana nada más para cambiar de tema, si preguntan qué por qué tanto tiempo simplemente di que tienes que preparar muchas cosas antes.

¿Cuándo vas a tener hijos?

Si estás casado, pero sin hijos, seguramente esta pregunta no faltará en las reuniones familiares. En este caso, puedes decir que no sabes y desviar la atención a otro tema, preguntando “¿Y sus hijos, tía?”.

¿Cómo que subiste de peso, no?

No pueden faltar en las reuniones familiares las preguntas sobre la apariencia, especialmente con el peso. Si este es el caso, simplemente responde con un tajante “sí” o “no” y si insisten en darte consejos sobre cómo bajar o subir de peso, diles que lo estás viendo con un especialista.

¿Y la tesis cómo va?

En este caso tienes dos opciones, decir “va bien” y desviar la atención a otro de tus logros escolares o puedes darle la razón y continuar con la conversación, por ejemplo “bien, gracias por preguntar, aunque tengo unos problemas en el planteamiento de mi marco teórico, ¿quieres ayudarme?” seguramente tu pariente perderá el interés y se irá.

Las comparaciones

No falta el pariente que te compara con tu prima que ya se casó, el primo que se acaba de comprar casa o tu hermano que tiene un auto nuevo. En ese caso, responde amablemente que no es agradable comparar a familiares y puedes agregar que es como si tú los compararas con el tío con más dinero o la tía más guapa. Probablemente no les gustará que les menciones a ese pariente cool, pero bastará para que se quedé tranquilo.

Vi tus fotos en Facebook ¿cómo que te la pasas de fiesta, no?

En ese caso, recuerda a tus parientes que eres joven y que ellos seguramente cuando eran jóvenes también les gustaba ir a fiestas. Aquí incluso puedes preguntar a algún otro de tus tíos sobre esos tiempos de juventud y seguro saldrán varios trapitos al sol.(Fuenteyfoto:AVC)