(Redacción)
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural se coordinó con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para la elaboración, promoción e implementación de la “Guía práctica para la prevención y mitigación del COVID-19 en la agricultura”
Se encuentra enfocada en cuidar la seguridad y salud de mujeres y hombres en las unidades de producción agropecuarias, produciendo los alimentos que México y el mundo requiere
El documento incluye medidas de prevención para evitar la exposición y propagación al virus
Ciudad de México a 02 de junio de 2020.- La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural se coordinó con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para la elaboración, promoción e implementación de la “Guía práctica para la prevención y mitigación del COVID-19 en la agricultura”.
Se encuentra enfocada en cuidar la seguridad y salud de mujeres y hombres en las unidades de producción agropecuarias, produciendo los alimentos que México y el mundo requiere.
El documento incluye medidas de prevención para evitar la exposición y propagación al virus.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural contribuyó a reforzar las medidas internacionales para la prevención de contagios por COVID-19 en el sector agroalimentario, a fin de garantizar la continuidad en la producción y distribución de alimentos para la población durante la etapa de contingencia.
La dependencia federal informó que, a través de la Subsecretaría de Agricultura, se contribuyó en la elaboración de la “Guía práctica para la prevención y mitigación del COVID-19 en la agricultura”, publicada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y la cual es también de observancia para unidades de producción en México de manera voluntaria.
En este documento se resalta que el suministro de alimentos es una actividad esencial y crítica que debe garantizarse, a fin de ofrecer a la población los insumos alimenticios que requiere de una manera segura y eficiente, acción con la cual la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural se encuentra comprometida.
Además, la guía tiene como objetivo el brindar orientaciones prácticas para la prevención y mitigación de la transmisión del COVID-19 en las actividades agrícolas que se desarrollan, en conjunto con las medidas establecidas por las autoridades sanitarias de cada uno de los países.
El manual está dirigido a empleadores o representantes de las unidades de producción agropecuarias y trabajadores agrícolas junto con sus familias que laboran y permanecen de manera permanente o temporal en estos centros de trabajo productivo e incluye medidas preventivas para evitar la exposición y propagación del virus y otras enfermedades contagiosas.
Acciones tendientes a reducir exposición y evitar propagación del COVID-19
Entre las medidas propuestas se destaca que los responsables de las Unidades de Producción deberán proporcionar los insumos que requieran los trabajadores para realizar una labor segura y, por su parte, quienes realizan las diferentes encomiendas en estos centros deberán cooperar en el cumplimiento de las recomendaciones de seguridad y utilizar el equipo de protección correctamente.
El documento plantea además que cada unidad de producción podrá designar un grupo de trabajo, que incluya al administrador y/o supervisor, los representantes de los trabajadores, y al responsable de la seguridad y salud del centro de trabajo, a efecto de contar con medidas unificadas de protección que permitan evitar riesgos de contagio.
Asimismo, se sugiere llevar un registro que incluya las actividades de limpieza y desinfección de las instalaciones, áreas comunes, herramientas, equipos de uso común, unidades de transporte, entre otros, después de cada uso y mediante procesos de aspersión con mezclas de alcohol etílico al 70 por ciento o con disoluciones de cloro.
Para ello, propone llevar un control de insumos que permita garantizar la suficiencia de suministros en todo momento.
Las medidas también incluyen generar un mapeo de riesgos de las unidades de producción y establecer grupos de trabajo de no más de cinco integrantes para minimizar el movimiento de trabajadores que facilite la trazabilidad y control –guardando la sana distancia de 1 a 2 metros y excluyendo a personal vulnerable para mitigar el riesgo de contagio—; en caso de que se identifique algún posible contagio dar aviso y activar los protocolos de control correspondientes.
Se propone también capacitar a la gerencia, los productores, los trabajadores y sus representantes sobre las medidas adoptadas para la prevención del riesgo de exposición al virus y sobre cómo se debe actuar en caso de infección por COVID-19. Adicionalmente, se establecen los protocolos para reducir riesgos entre los trabajadores y capacitación del uso correcto, mantenimiento y desecho del equipo de protección personal.
Otra de las acciones planteadas es establecer filtros de control en los accesos para la detección de síntomas y el control de la temperatura corporal, el uso de mascarillas de protección y guantes desechables, y efectuar paros laborales programados para llevar a cabo labores de sanitización y desinfección, de acuerdo con las etapas de producción.
Esta guía incluye las acciones generales que se sugiere realizar para evitar contagios y se encuentra acorde con las recomendaciones emitidas por las autoridades sanitarias tanto en México como a nivel regional en América Latina.
Para facilitar su adopción en los centros de trabajo, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural subió en su página electrónica (https://www.gob.mx/agricultura/documentos/medidas-preventivas-para-trabajo-en-campo-y-para-la-entrega-de-apoyos?idiom=es) tanto la guía de acción para centros de trabajo agrícolas elaborada por la Secretaría del Trabajo como la Guía emitida por la OIT, las cuales se complementan, con videos y cápsulas de la OIT.
Con estas acciones, Agricultura contribuye a garantizar la operación de las unidades de producción en el medio rural, a fin de contar con los alimentos que se requieren en el país y en el mundo para seguir haciendo frente a la contingencia.