[Redacción]
Alrededor de 800 millones de personas se acuestan con hambre cada noche y abatir esta situación es responsabilidad de todos: agricultores, empresas, escuelas, universidades, organizaciones internacionales, así como cada uno de nosotros
Ciudad de México.- Este año el lema de la FAO es “Cambiar el futuro de la migración. Invertir en seguridad alimentaria y desarrollo rural”, pues el fenómeno de la migración derivado del aumento de los conflictos y la inestabilidad política, han favorecido el crecimiento del hambre y la pobreza.
Por otra parte, tres cuartas partes de las personas en situación de pobreza extrema basan sus medios de subsistencia en la agricultura u otras actividades rurales, así que crear condiciones que permitan a las poblaciones rurales, especialmente a los jóvenes, permanecer en sus hogares, es un componente crucial de cualquier plan para emprender el desafío migratorio.
La seguridad alimentaria requiere un enfoque holístico y requiere una serie de acciones complementarias para abordar las causas profundas del hambre y la malnutrición. Las medidas necesarias pueden incluir mejoras de la productividad e ingresos de los pequeños productores de alimentos, la resiliencia de los sistemas de producción alimentaria, así como el uso sostenible de la diversidad biológica y los recursos genéticos.
El Día Mundial de la Alimentación, promueve la concienciación y la acción en todo el mundo a favor de aquellos que padecen hambre, y en este sentido la SAGARPA, desde 2013, ha a poyado con recursos la construcción y equipamiento de 11 Bancos de Alimentos, y en este 2017 se están terminando de construir seis Bancos más.
Los Bancos de Alimentos que han recibido apoyo directo para infraestructura por parte de SAGARPA desde 2014 han sido los siguientes: Torreón, Los Mochis, Querétaro, Zapotlanejo, Xalapa, Tepatitlán, Cancún, Guanajuato, León y el Centro Nacional de Acopio y Distribución (CENADI)
En 2016 y 2017, la SAGARPA apoya a los siguientes Bancos: Morelia, Puebla, Navojoa, Chihuahua, Saltillo y Mérida, con el fin de mejorar el rescate y distribución de alimento a la población en carencia alimentaria.
El Día Mundial de la Alimentación es también una importante oportunidad para reflexionar en que podemos acabar con el hambre en el curso de nuestras vidas y convertirnos en la Generación Hambre Cero, pero todos tenemos que trabajar juntos para lograr este objetivo.