[Jorge Jesús de la Cruz]

* Déjenlo trabajar a Gaudiano

Desde que asumió el cargo de alcalde hace un año, a Gerardo Gaudiano lo han encartado en la sucesión gubernamental del 2018, pese a que nunca ha expresado de viva voz tal interés, y cuando le preguntan sobre el tema, responde que está dedicado a trabajar, es más, ni se ocupa de cómo se va a organizar el proceso interno, ya que lo suyo es poder cumplir sus compromisos, entregar buenas cuentas y que la ciudadanía decida libremente.

Como gente joven, Gaudiano Rovirosa ha demostrado tener el temple necesario para afrontar la beligerancia de sus detractores, que viene de dentro y de fuera de su partido, ya que muchos de los que patrocinan la guerra sucia en su contra son políticos intolerantes que buscan a fuerzas meterse en la sucesión local, pero no levantan aunque gasten mucho dinero, mientras el alcalde sigue en lo suyo, que es trabajar todos los días de la mano de la gente.

Hace dos semanas hubo una lluvia que ni los responsables de emitir el pronóstico del tiempo pudieron vaticinar la cantidad de agua que iba a caer, fueron más de 210 mm en una hora, algo nunca visto. La situación se agravó derivado de la enorme irresponsabilidad social de tirar basura a las calles, aunado a que muchos cárcamos se vieron rebasados en su capacidad

Quienes ven a Gerardo como un adversario fuerte para la sucesión gubernamental están pendientes día y noche de todo lo que hacen; como todo ser humano puede tener errores al momento de estar respondiendo a una entrevista, a muchos políticos les ha pasado; sin embargo, los francotiradores a sueldo le dan a todo lo que se mueve, queriéndole poner piedras en el camino, pero ni así podrán hacer mella en el posicionamiento que tiene.

Nada les gusta. Criticaron el programa de embellecimiento de la ciudad, quisieron poner en tela de duda los procesos de licitación para el alumbrado de la Av. Universidad, incluso ahora hasta pretenden involucrar a su hermano Cristóbal en algunos asuntos legales, pero nada hay de manera oficial, solo especulaciones y escándalos mediáticos, que lejos de bajarlo de las preferencias ciudadanas, lo fortalecen.

Con Gaudiano Rovirosa se puede aplicar la frase del Quijote de la Mancha. Ladrán Sancho, señal que cabalgamos. Déjenlo trabajar, como joven seguirá demostrando que tiene temple y carácter para afrontar el vendaval. Seguirán escribiendo muchos infundios más de eso no hay duda, lo bueno que está identificada la mano intolerante del que mece la cuna.

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