[Jorge Jesús de la Cruz]

* Revisión de cuentas, negocio del OSFE

La revisión de las cuentas públicas se ha convertido en un negocio redondo para el Órgano Superior de Fiscalización, debido a que piden dinero a los alcaldes, en este caso a quienes ya dejaron de serlo, a cambio de maquilarles bien sus cuentas, y como no ha faltado quienes tuvieron mano larga, le entran al negocio sucio, aunque en las inspecciones físicas que se realizan, los diputados encuentran anomalías, mismas que los encargados del OSFE, las justifican con argumentos sin sentido.

Lo curioso es que cuando van a defender una cuenta pública, hablan de vicios ocultos, de inconsistencias menores, pero cuando un ex alcalde no le ha entrado al negocio, como sucedió en Teapa, se van con todo, cayendo en el garlito los diputados de la Comisión Inspectora de Hacienda, porque en realidad, quienes tienen el control de las cuentas públicas, es el personal del OSFE, donde seguramente su titular, José del Carmen López Carrera se debe llevar una buena tajada.

Me decía un ex alcalde de la región de Los Ríos, los del OSFE solo te piden dinero, no inspeccionan nada, pero como no les dí nada, entonces pretenden engañar a los diputados de que se debe revisar hasta con lupa algunas obras en específico, pese a que la misma ley permite hacer solventaciones.

Sobre el tema, otros compañeros han descrito la manera como se les da tratamiento a las revisiones de las cuentas públicas. Es una mafia la que se encuentra enquistada al interior del OSFE, y cuando no pueden obtener nada, es donde pretenden involucrar a los diputados para que escarben y determinar si las obras están bien hechas o no, a como ocurrió en Centla hace dos días.

El ex alcalde Ramón Hernández, contador de profesión, no se dejó sorprender por los chantajes del OSFE, no les dio dinero a cambio de que validaran su cuenta pública, les dijo que todo lo entregado estaba en orden y se sujetaba a la ley, fue cuando el personal de esa instancia persuadió a los diputados para querer revisar al detalle algunas obras, pero no encontraron nada, por el contrario, al preguntarles a beneficiarios de una obra de electrificación, dieron estar agradecidos con esa obra, porque tenían muchos años pidiéndola.

Algo se debe hacer para que esa mafia enquistada en el OSFE deje de sobornar con el pretexto de maquillar cuentas públicas. Parecen sicarios, actúan en grupos, como si fueran delincuencia organizada, si todos los ex alcaldes decidieran denunciarlos, se destaparía la cloaca, nada más que hay quienes si andan mal, por eso cedieron a ese negocio turbio y no van a decir nada, pero las anomalías de esta gente, es evidente y deben desterrarla.

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