[Redacción]

El ejemplar de Orca (Orcinus orca) se encontró vivo en zona rocosa del litoral costero de la Isla Coronado, dentro del Parque Nacional Bahía de Loreto

Autoridades ambientales, en coordinación con la Red de Atención para Varamiento de Mamíferos Marinos para las costas de Baja California Sur, brindaron atención al ejemplar

Análisis de sangre permitieron determinar que el ejemplar presentaba infección

Tras atenderlo y llevarlo a mar adentro, el ejemplar regresó por segunda ocasión a la zona donde varó y, tras convulsionarse, murió

La Paz, Baja California Sur.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), en coordinación con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y especialistas en mamíferos marinos del delfinario Cabo Dolphins y del Museo de la Ballena de La Paz, atendieron el varamiento de un ejemplar de Orca (Orcinus orca), en Isla Coronado, dentro del Parque Nacional Bahía de Loreto, B.C.S.

Personal de PROFEPA activó la alerta a los integrantes de la  Red de Atención para Varamiento de Mamíferos Marinos para las Costas de Baja California Sur, quienes acudieron de inmediato al evento reportado por un prestador de servicios turísticos (Dolphin Dive Center).

Junto con especialistas de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), se constató que el ejemplar hembra juvenil de seis metros de longitud, se encontraba vivo, varado en una zona rocosa de la costera de Isla Coronado, con solo la mitad de su cuerpo dentro del agua.

De inmediato se brindó protección cubriendo con una manta la zona dorsal del cetáceo, para evitar daños en su piel por los rayos del sol, constatando que presentaba una respiración normal, aunque por momentos sangraba de la parte vaginal, que presuntamente indicaba un probable parto con complicaciones.

Con apoyo del personal del delfinario Cabo Dolphin y del Museo de la Ballena se hidrató al ejemplar y se le tomaron muestras de sangre para análisis de química sanguínea y biometría hemática para valorar su salud, las cuales se enviaron para su procesamiento inmediato a la Ciudad de Loreto con el apoyo del Grupo Ecologista Antares (GEA A.C.).

Posteriormente, en una embarcación se trasladó el cetáceo a la playa Ensenada Blanca, a un kilómetro del lugar del varamiento, practicándole un ultrasonido con equipo especializado, descartando la posibilidad de embarazo al resultar negativo el estudio.

Una vez analizados los resultados de análisis de sangre, el médico especialista en mamíferos marinos del delfinario Cabo Dolphins determinó que el ejemplar presentaba una infección, por lo que se le suministró antibiótico.

Para evitar mayor estrés al ejemplar y brindarle oportunidad de incorporarse a vida libre, se le trasladó a dos kilómetros mar adentro con el apoyo de una embarcación, donde el ejemplar continuó con nado y respiración aparentemente normales.

Sin embargo, después de un momento, cambió de rumbo y regresó al mismo lugar donde fue encontrada por primera vez, siendo infructuosos los intentos de disuasión para evitar el nuevo varamiento.

Una vez en la orilla del mar, descansó por un momento y después convulsionó, por lo que a pesar de los esfuerzos realizados para salvarle la vida, falleció.

Debido al tamaño y peso del ejemplar, no fue posible transportarlo a un sitio adecuado para practicar la necropsia correspondiente.

El esqueleto del ejemplar servirá para educación ambiental y será exhibido en el Museo de la Ballena, ubicado en la ciudad de La Paz, que cuenta con una de las colecciones más diversas de esqueletos de cetáceos del mundo, el cual fomenta la creación de colecciones científicas, históricas, bibliográficas y artísticas con fines museográficos.