[Redacción]
Núñez Jiménez señaló que el instituto no cuenta con un fondo de pensiones y cada año aumenta el número de servidores que se jubilan
Villahermosa, Tabasco.- El gobernador Arturo Núñez Jiménez., afirmo: “La reforma a la Ley del Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco (ISSET) no fue una decisión fácil. La medida era necesaria porque sería irresponsable seguir permitiendo que se aumente el déficit público y no actuar a tiempo por evitar decisiones difíciles”.
Y con relación a las voces discordantes que rechazan la nueva legislación, el mandatario estatal aseguró que también se partió del supuesto de que en una sociedad son fundamentales los derechos de sus integrantes, pero también el cumplimiento de sus obligaciones.
Subrayó: “una sociedad de sólo sujetos con derechos sin obligaciones, es una sociedad que no tiene futuro ni viabilidad y no queremos que eso le ocurra a Tabasco”.
Núñez Jiménez señaló que el instituto no cuenta con un fondo de pensiones y cada año aumenta el número de servidores que se jubilan. Muy pronto, advirtió, no habría capacidad en las finanzas estatales para mantener el nivel de subsidio que requiere fondear estas jubilaciones y los otros servicios que presta la institución.
“En la política siempre se elige entre inconvenientes. No se elige entre lo bueno y lo malo, y si así fuera quién quisiera lo malo para su pueblo, nadie. Aunque personalmente fuera malo el gobernante, no podría querer el mal para su pueblo, por simple razón de instinto de conservación, mantener la popularidad o conservar el voto. No es así”, dijo.
Aseveró que se toman decisiones en situaciones muy críticas, y generalmente se tiene que escoger entre lo malo y lo peor, y se escoge lo malo por ser menos malo, no porque se quiera algo malo para el pueblo. “Entonces, las decisiones implican la atención de derechos, pero también el cumplimiento de obligaciones”, expresó.
El Ejecutivo estatal explicó que han sostenido conversaciones con los dirigentes sindicales de los burócratas sobre la nueva ley, por lo que “seguimos abiertos a continuar teniendo esa disposición, porque creemos con plena convicción de que toda legislación es perfectible”.
Consideró que aparentemente los trabajadores tienen algunos problemas de interpretación, por lo que mostró su disponibilidad por hacer el texto más claro para que no existan esas dudas y queden claros los objetivos que se buscaron en la ley.
“Que los servidores públicos tengan la seguridad de que la nueva legislación les traerá importantes beneficios. Algunos los podrán ver a corto y mediano plazos, y otros son a largo plazo”, enfatizó.
El mandatario estatal insistió en que si no se hacía la reforma, no habría pensiones jubilatorias para muchos de los actuales trabajadores y los que se incorporen en el futuro al Gobierno del Estado. “Tenemos que ser responsables con las presentes y futuras generaciones de servidores públicos”, concluyó.