[Jorge Jesús de la Cruz]

* De Carlos Madrazo a Erubiel

Hace 100 años nació un insigne tabasqueño, Carlos Alberto Madrazo Becerra, que trascendió más allá de su época, hoy se le recuerda con un acto cívico al que seguramente asistirán cientos de personas que siguen creyendo en su ideario político, aunque haya habido intentos del dirigente priista de querer boicotear el evento, pero no pudo lograr sus fines aviesos.

Carlos Madrazo cuando dirigió el CEN del PRI decía, “Yo aspiro a integrar una militancia espontánea, inteligente y razonada. No queremos rebaños que van y vienen según la presión y las circunstancias; queremos convencidos, no forzados. Gentes que van a un acto del partido porque ellas, quieran ir, no porque las llevan; porque saben a qué van, porque nuestra razón la han hecho suya, porque nuestra mística las ha sacudido”.

Son enseñanzas que la dirigencia que tiene Erubiel Alonso no la ha aprendido a llevar a cabo, se ha perdido la mística, el amor a la camiseta en el tricolor.

También decía el Ciclón del Sureste “en la medida en que nos empeñemos en sostener como candidatos a cualquier puesto público a personas que, ni aman, ni sienten, ni comprenden la Revolución, la culpa de las futuras equivocaciones será nuestra y no de aquellos que nunca se han identificado con nuestra causa”.

Con la derrota del tricolor de hace un mes en la entidad, se pone de manifiesto que Erubiel nunca ha leído esos discursos del ex gobernador, porque de lo contrario, no se hubieran cometido esos errores, al poner candidatos que no garantizaban y por eso perdieron.

Otra frase que encontramos de Carlos A. Madrazo, “un partido mudo carece de mensaje y no es partido porque no aglutina, ni tiene nada que decir; un partido que hable demasiado corre riesgos innecesarios. El punto exacto es un justo equilibrio. Actuar siempre. Hablar cuando sea preciso”.

Pero Erubiel hablo demasiado en la campaña y una vez que se tuvieron los resultados electorales, prefirió callar, esconderse para no dar la cara a la realidad que se tuvo en las urnas. Sin lugar a dudas, le falta aprender mucho más de los discursos de Carlos Madrazo, si es que acaso insiste en querer mantenerse al frente de la dirigencia simulando.

Una frase más de Madrazo Becerra, “Yo no creo en la simulación, ni en hacer política a base de confundirla con la politiquería, ni en las intrigas que revelan sólo la falta de mensaje de quien las hace”. Vaya que están vigentes sus ideas.

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