[Redacción]
Presenta Wilver Méndez, titular de la SDET, oportunidades de negocios en el sector y detalla la riqueza que tiene Tabasco en estos recursos
Villahermosa, Tabasco.- En el 2018 nuestro estado tendrá una economía que propiciará las condiciones para generar infraestructura e incrementar su productividad y competitividad, en un marco de sustentabilidad, transparencia, rentabilidad y responsabilidad social, aseguró el secretario de Desarrollo Económico y Turismo (SDET), Wilver Méndez Magaña.
Y es que en representación del Gobernador Arturo Núñez Jiménez, el funcionario presentó a empresarios las oportunidades de inversión en el sector energético, y destacó que,-en el marco de la Reforma Energética, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) es de suma importancia para el sistema circulatorio de la industria mexicana en materia de hidrocarburos, electricidad y energías renovables.
Acompañado de Guillermo García Alcocer, presidente de la CRE, resaltó que Tabasco tiene 31 por ciento de la producción de petróleo en territorio marino y terrestre del país; 35 por ciento de gas natural y tres de los siete complejos procesadores de estos recursos en México, por lo que dada la estructura de consumo nacional, más de la mitad de lo que se inyecta a la red de gasoductos proviene de nuestra entidad.
Además, tenemos un potencial anual de generación de energía renovable equivalente a 1 mil 980 megawatts, entre eólica, solar e hidráulica, que podría desarrollar en cinco años una inversión estimada en 39 mil 700 millones de pesos, así como crear 15 mil empleos, apuntó Méndez Magaña.
Por otra parte, la entidad cuenta con un potencial de producción de 70 millones de litros anuales de biocombustible: 32 millones de biodiesel y 38 de bioetanol, detalló en presencia de Leopoldo Rodríguez Olivé, presidente de la Asociación Mexicana de Energía Eólica, y de Juan Acra López, presidente del Consejo Mexicano de Energía;
Recordó también que la CRE autorizó en mayo pasado la Zona Geográfica de Tabasco para la distribución de gas natural en diez municipios, lo que permitirá el desarrollo de infraestructura, distribución y comercialización del combustible en empresas, hogares, comercios e industrias.
Wilver Méndez confió en que dicha Comisión autorizará a la empresa Gas Fenosa el primer permiso de comercialización en la entidad; esto significaría una derrama de más 700 millones de pesos en infraestructura y 400 empleos directos, expuso ante el comisionado Jesús Serrano Landeros.
Asimismo, informó que la empresa Glencord invierte 43 millones de dólares en el Puerto de Dos Bocas, para construir la primera terminal marina de almacenamiento de gasolina y diésel, mientras que Abengoa de México estima iniciar operaciones del tercer tren de cogeneración de energía eléctrica en marzo del 2018, con capacidad de 380 megawatts y recursos por 750 millones de dólares.
En materia de investigación y desarrollo, el secretario citó que el Gobierno del Estado con el Centro de Investigación Aplicada de Querétaro y el CONACYT, construyen en el Parque Industrial de Cunduacán el Consorcio de Centros de Investigación y Desarrollo, y que pronto será inaugurada la primera planta piloto de biodiesel con base en microalgas de la empresa Cepro-Ecología.
En cuanto a la cuarta Zona Económica Especial, en las rondas petroleras se adjudicaron zonas terrestres y aguas someras situadas frente a Tabasco, para desarrollar y explotar campos con una inversión de 10 mil millones de dólares, indicó ante Héctor Alonso Olea, presidente de la Asociación de Energía Solar de México.
Por su parte, Guillermo García ponderó las excelentes oportunidades de Tabasco para diversificar su economía, impulsar nuevas empresas aprovechando los diversos tipos de energía y aprovechar las ventajas de la Reforma Energética. Por ejemplo, explicó, puede producir hasta 4.3 kilowatts hora por metro cuadrado de radiación solar, equivalente a generar la energía eléctrica de todo el país.
A su vez, el secretario de Energía, Recursos Naturales y Protección Ambiental, Ricardo Fitz Mendoza, valoró el papel de la CRE al regular las actividades de la industria energética y dar certidumbre a la inversión productiva, a fin de una sana competencia en materia de cobertura, confiabilidad, calidad y seguridad en el suministro y la prestación de servicios a precios competitivos.
